Hoy he despertado con un dolor enorme en el glúteo izquierdo, dígase en la nalga, a tal punto que me he preguntado ¿terminaré la jornada?.
Para comenzar la etapa hacia Caldas de Reís se pasa por el puente del Burgo. En el municipio hay más de trescientos puentes sobre ríos. La historia de Pontevedra está inseparablemente ligada a la del viejo puente romano, Ponte Veteri de ahí su nombre y donde en la actualidad está situado el puente del Burgo.
La salida de Pontevedra fue muy bonita, pues pasamos por el Puente que estaba alumbrado como las constelaciones.
Vistas de la ciudad Pontevedra
Desde Pontevedra centro hasta el puente hay pequeñas luces en las calles que guían el camino del peregrino.
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La etapa era un poco larga y con algunas cuestas de más, tampoco fue una etapa con un paisaje particularmente lindo.
En cambio una gran parte fui conversando con dos niños de una familia portuguesa. Viven en Aveiro, de 11 y 12 años, Joana y Santiago. Vienen haciendo el camino desde Valença, me comentaron que me habían visto desde el inicio o mejor dicho se fijaron en mi mochila en el letrero de #gaviotaporelmundo.
Fue una charla interesante sobre todo cuando comenzamos hablar de las edades, el chico me preguntó quien creía que era mayor si él o su hermana, ya sabía que que era una pregunta trampa, pero dije lo que pensaba que era la niña y el molesto dice que siempre le dicen que es el menor cuando es el mayor.
En cambio cuando pregunté que edad creían tenía me dijeron unos 32, 33,35 años. Como cambia la perspectiva yo estaba tan feliz por aparentar menor edad y él en cambio no. Los años pasan y los pensamientos cambian. Cuantos no quisiéramos quedarnos en esa etapa.
También nos encontramos con una cubano de Santa Clara que actualmente vive en Miami que estaba haciendo el camino e iba recogiendo la basura que se encontraba.
Tantas veces que pasamos por sitio y decimos porque la gente es tan sucia y deja cosas ahí pero ¿hacemos algo? ¿Ponemos nuestro grano de arena en que nuestro hogar el planeta sea un mejor sitio?
Claudia tubo que parar pues las ampollas la llevaban mal, y entonces se realizó la técnica de dejar supurar la ampolla sin cortarla. Luego siguió con las sandalias y calcetines para terminar la etapa y como nueva.
La jornada terminó bien, con risas y ya con las cañas típicas del km X antes de entrar a la ciudad o pueblo.
En Caldas de Reís la verdad un pueblo muy pequeño, siendo su mayor atractivo los baños termales.
El balneario Dávila que tiene el uso exclusivo de las termas, siempre tuvo fuera una zona que antiguamente era para lavar y sigue llegando aguas termales aunque no a la misma temperatura que dentro pero yo diría que al menos unos 30 grados seguramente y es un sitio donde la mayoría de los peregrinos paramos a refrescar nuestros pies.
Estando allí una pareja casi nos vendió el Balneario Dávila pues lo explicaban con mucha emoción.
La verdad nos apetecía un poco de relax y allá fuimos, unos 13€ unos 30minutos una tina en habitación privada el agua a unos 40 grados aunque yo no la sentí tan así.
A mí y a Claudia nos gustó en cambio a Miguel lo agobió y terminó poniendo agua fría. Salí como nueva, casi lista para otros 30 km pero en cambio nos fuimos a por unas cervezas.
Como casi todos los días del camino nos fuimos a cama temprano, dormíamos en habitaciones privadas así que había que aprovechar el relax.
El dolor de mi nalga fue aminorando, me habrá dado un tirón en algún momento pero nada de otro mundo.
Sigo sin ampollas, es una señal.
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